Los nutricionistas nos indican que lo más indicado es consumir medio pomelo al día. Es una cantidad justa y adecuada con la cual beneficiarnos de sus increíbles propiedades, pero eso sí, sin olvidar nunca complementar ese desayuno con algo de proteína.
Hoy en nuestro espacio queremos darte 5 buenas razones para que siempre tengas en cuenta a esta fruta tan sensacional y adecuada para cuidar de nuestra salud y, por supuesto, de nuestra línea.
1. Los pomelos cuidan de tu corazón
Te gustará saber que existen muchas variedades de pomelo o toronja. Los encontrarás de diferentes tonalidades, más ácidos y más dulces. Por ello, siempre valdrá la pena encontrar aquel tipo que más se ajuste a nuestro paladar.
Una vez lo hayas hecho, lo primero que debes saber es que si consumes medio pomelo cada día en tu desayuno tu corazón lo va a agradecer.
- Los pomelos son el resultado de una poderosa combinación de nutrientes a base de fibra, potasio, licopeno, vitamina C y colina. Todos estos elementos propician el equilibrio de nuestra salud cardiovascular al luchar contra la aterosclerosis.
- Según un interesante estudio, todos aquellos pacientes aquejados por colesterol elevado que incluían en su dieta medio pomelo rojo fresco al día lograban reducir el colesterol malo o LDL, además de minimizar el nivel de lípidos en sangre.
- Gracias al gran aporte en potasio que nos ofrecen los pomelos logramos prevenir en una probabilidad muy interesante el riesgo de enfermedades isquémicas.
2. Los pomelos y la pérdida de peso
Al respecto de la pregunta de si el consumo regular de pomelos nos puede ayudar a perder peso, la respuesta es sí pero, obviamente, hemos de añadir muchos matices.
- Los pomelos “facilitan” la pérdida de peso siempre y cuando mantengamos una dieta variada y equilibrada.
- Este cítrico lo que consigue es aportarnos sensación de saciedad gracias a su alto contenido en fibra.
- Tampoco podemos olvidar que son muy bajos en calorías, que son diuréticos, antiinflamatorios y que, además, gracias a su aporte en potasio, obtenemos energía a la vez que eliminamos todas esas toxinas que el cuerpo no necesita.
3. Los pomelos favorecen la belleza y el cuidado de la piel
- Este aspecto nos parece muy interesante. La vitamina C que contienen los pomelos nos van a ayudar a combatir el daño de la piel causado por el sol y la contaminación.
- Si nos acostumbramos a tomar cada día esa media ración de pomelo fresco, favorecemos a que nuestro organismo pueda sintetizar colágeno y, con ello, reducir el impacto de las arrugas y mejorar la textura de la piel.
4. Los fitonutrientes del pomelo nos ayudan a combatir múltiples enfermedades
El pomelo contiene limonoides, unos fitoquímicos que ayudan a prevenir la propagación y el crecimiento de las células cancerosas.
Ya sabemos que en materia de prevención del cáncer toda recomendación es poca, pero nuestra alimentación es siempre un aspecto esencial que debemos cuidar.
Las variedades de pomelo más poderosas y más ricas en fitonutrientes son el pomelo rosa y el rojo, puesto que son más ricos en licopeno.
5. Los pomelos nos ayudan a evitar la formación de cálculos renales
- Este dato también es importante: el consumo regular de pomelos, así como de naranjas o zumo natural de manzana, nos ayuda a reducir el riesgo de formar cálculos renales de oxalato de calcio.
- Si nos acostumbramos a tomar medio pomelo en el desayuno y luego un vaso de jugo de manzana natural a lo largo del día nuestro pH y el ácido cítrico nos ayudarán a combatir la presencia de los cálculos renales.
Pomelo en tu desayuno: formas en que puedes consumirlo
Tal y como te hemos señalado al inicio, un desayuno debe ser siempre variado y equilibrado. Es importante que contenga algo de fibra, vitaminas, antioxidantes y un poco de proteína.
Por su parte, a la hora de consumir pomelo tienes divertidas y deliciosas opciones:
- Medio pomelo con un poco de canela y miel por encima.
- Una ensalada de trocitos de pomelo, manzana y nueces.
- Una copa con medio pomelo, yogur blanco bajo en grasas y trocitos de almendra.
- Una taza con trocitos de pomelo, espinacas y nueces.
- El jugo natural de medio pomelo.
- Una ensalada con trocitos de pomelo, chocolate negro sin azúcar y kiwi.
Como puedes ver tienes múltiples opciones, solo tienes que encontrar la que más se ajuste a tu estómago y tus gustos personales.
Tu salud te lo va a agradecer.
Fuente: http://mejorconsalud.com/razones-incluir-pomelo-desayuno/